La riqueza inmobiliaria de las familias sigue en caída libre

El descenso en el precio de la vivienda, superior al 45% desde máximos, principal causa
Desde que tocara máximos en 2008, se ha reducido en más de un billón de euros
La riqueza financiera neta de los hogares aumentó en cambio un 17,4% el pasado año


La riqueza inmobiliaria de las familias españolas ha caído durante la crisis debido al descenso del precio de los activos inmobiliarios. Así lo señala un informe de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco).

De esta forma, como apunta en su Informe del 2013 y perspectivas para el 2014, en los últimos dos años ha acusado más esta bajada, situándose a finales de 2012 (último dato disponible) en el 431% del PIB, frente al 548% del PIB de 2007. Para 2013, Inverco estima que se habrá situado en el 400% de la riqueza nacional.

Estos datos corroboran la tendencia que ya señaló el Banco de España, cuando indicó que la riqueza inmobiliaria de las familias se ha reducido en alrededor de un billón de euros, el equivalente al PIB español, desde que tocara máximos en junio de 2008 al inicio de la crisis, en paralelo al desplome del precio de los inmuebles.

El valor de la vivienda, desde máximos, se ha depreciado en más de un 45%, como apuntan las principales agencias de tasación. Sobre el futuro, las agencias de calificación internacional apuntan a que esta depreciación continuará en 2014 para tocar fondo en 2015.

Activos financieros

Por otra parte, el mismo informe indica que la riqueza financiera neta de las familias -diferencia entre los activos y pasivos financieros- aumentó en 2013 un 17,4%, superando ya el billón de euros (1,05 billones), debido tanto a la reducción estimada de 50.000 millones de euros en los pasivos financieros como al incremento del volumen de activos, en gran parte como consecuencia de la revalorización de las acciones y los fondos de inversión.

En el informe, se estima que la riqueza financiera de las familias a finales del pasado año se situó en el 102,5% del PIB, por lo que habría podido "neutralizar en su totalidad" los efectos de la crisis, superando incluso el nivel de 2006.

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